miércoles, 8 de abril de 2009

Entre olor a copal y cirios, salen penitentes de Taxco en busca del perdón del mundo

En localidad aledaña representan el peregrinar de ánimas en pena

Entre olor a copal y cirios, salen penitentes de Taxco en busca del perdón del mundo
CORRESPONSALIA

TAXCO, 7 DE ABRIL. Entre pendientes y ascensos de callejones y calles empedradas de Taxco manchadas de cera, unos 500 penitentes encorvados de seis hermandades con pesadas cadenas atadas a los pies y cubiertos el rostro con un capitore, descalzos y silenciosos, en un trayecto de 3 kilómetros caminaron en la procesión de este Martes Santo dedicado a las ánimas Benditas del Purgatorio, con lo que buscan el perdón del mundo.

En esta tercera procesión y la segunda de manera nocturna, varios grupos de hermandades de ánimas de ambos sexos caminan descalzos por más de seis horas paso a paso y encorvados con cristos, rosarios y cirios, que llevan en sus brazos, van orado por las almas en pena.

En la cintura llevan un cabresto de crin de caballo, que los mantiene en una posición difícil de respirar, que encorvados caminan lentos por las piedras de Taxco.

Las ánimas son mujeres que portan cirios y van con un faldón y una blusa negra, que cubren todo el cuerpo, portan cirios en sus manos y en cada uno de sus pies llevan atadas cadenas que arrastran, con lo que producen un sonido especial que se conjuga con las piedras de Taxco.

Mientras que los encorvados algunos se cubren el cuerpo al igual que la cabeza con un capirote y en la cintura llevan un laso de crin de caballo, mientras otros van con el dorso descubierto y en posición arqueada, arrastran una cadena entre un grupo, donde el lamento y la aflicción se ve en sus ojos rojizos por el esfuerzo que hacen y más aún en las pendientes.

Desde muy temprano la atmósfera de este Martes Santo sufrió una transformación, el aroma del copal y la guardia que se lleva a cabo con una de las imágenes que participan dentro de una casona catalogada, absorbe la atención por presenciar a los encapuchados en dos filas mantener la vigilia, cuando en las capillas participantes preparan las imágenes para la aparición por la noche.

En un cálido nocturnal, las imágenes de las ánimas de las iglesias de San Nicolás Tolentino, que es llevada en hombros por hombres cubiertos del rostro mientras otros cargan de manera civil el Cristo Ciervo de Dios, los barrios de Pilita y los arcángeles San Rafael y San Gabriel son los principales exponentes de esta procesión.

Cuando en la comunidad de Acamixtla se desarrollala procesión llamada de los Huesitos donde en las manos llevan algunos penitentes un osamenta en representación de mortales que vagan sin encontrar un regocijo en las el espacio celestial.

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