En esta semana Andrés Manuel López Obrador recorrerá el Estado de San Luis Potosí, Estado que se ubica en la región norte-centro del territorio nacional y ocupa un área muy amplia del altiplano mexicano. En su recorrido visitará Catorce, y no es el número natural que sigue trece y precede al quince; tampoco es un grupo de música de Rock.
Real de Catorce es una población minera y turística enclavada en el corazón de la sierra de San Luís Potosí. Se encuentra a 2750 metros de altitud una de las zonas más altas. Esta situación convierte a Real en uno de los sitios más fríos de la república, especialmente en las noches, pero también en uno de los más altos y con mejores paisajes de altura de toda la meseta central. Su principal vía de acceso es a través de un túnel de 2300 metros de longitud.
Se fundó en el año de 1779 debido al descubrimiento de ricas minas de plata. Mineros y aventureros llegaron al lugar en busca de suerte desatándose una verdadera fiebre de la plata.
Actualmente alcanzará una población de 11,138, su población es básicamente rural; aunque existen grupos huicholes que celebran el culto al peyote, planta que abunda en esta región. Año con año, los huicholes realizan aquí sus ritos ancestrales, que los sitúan tras larga peregrinación en un mundo renovado y misterioso. Para ellos, en Real de Catorce se encuentra la montaña sagrada Wirikuta, donde encuentran la purificación.
San Francisco es el patrono. Cuenta la gente de Real de Catorce que cada año le tienen que cambiar las sandalias a San Francisco de Asís, porque le aparecen desgastadas como si caminara mucho, por lo que la gente piensa que anda recorriendo a pie todo el pueblo ayudando a los necesitados.
Real de Catorce, pueblo mágico.
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