Conflicto entre negros y mexicanos preocupa a Nueva York
jueves 5 de agosto de 2010 13:53 Por Daniel Trotta
NUEVA YORK ago 5 (Reuters) - Una ola de ataques de jóvenes negros contra inmigrantes mexicanos ha llevado a la policía a realizar una muestra de fuerza y a los políticos a tomar acciones rápidas, preocupados por el conflicto étnico en el suburbio neoyorquino de Staten Island, en Estados Unidos.
Profundamente preocupados por el conflicto étnico, autoridades de la ciudad, defensores de los inmigrantes y el consulado mexicano anunciaron una serie de medidas para reducir la violencia, pese a no estar de acuerdo sobre la causa de los ataques y la forma de detenerlos.
La situación combina dos de los problemas sociales estadounidenses más complicados: la difícil situación de los jóvenes negros que carecen de empleo y oportunidades, y los trabajadores inmigrantes que huyen de la pobreza y la violencia en sus hogares buscando empleos de bajo salario que los locales suelen negarse a tomar.
La policía investiga al menos 10 incidentes de golpizas o robos y delitos cometidos por prejuicio desde abril y ha inundado el vecindario de Port Richmond con patrullas, oficiales en las calles y torres de vigilancia móviles.
Expertos dicen que los incidentes podrían ser mucho más que los reportados, ya que los inmigrantes ilegales con frecuencia no denuncian delitos ante la policía por temor a ser deportados.
En las calles, los inmigrantes mexicanos hablan de cómo ellos o sus compatriotas han sido atacados, lo que sugiere que sucedieron más de 10 casos.
El aumento policial comenzó la semana pasada, luego de que el 23 de julio varios jóvenes gritando consignas anti-mexicanas atacaran a un mexicano de 31 años, rompiéndole la mandíbula y cortándole la cabellera mientras le robaban su mochila.
BLANCOS FACILES
Las golpizas suelen ir acompañadas de epítetos anti-hispanos, en algunos casos sin necesidad de que exista un robo de por medio.
"No es nada más que odio étnico", dijo Gerardo Garcia, un inmigrante jornalero de 29 años originario de Acapulco.
"Intentamos hacer las cosas bien. Trabajamos. Vamos a casa. No buscamos peleas. Pero siempre somos enfrentados por grupos de cuatro o cinco chicos negros que siempre quieren pelear. No buscan dinero, sólo quieren pelear", indicó.
Los jóvenes podrían estar buscando blancos fáciles para robar a hombres que portan grandes cantidades de efectivo en sus días de pago.
"Es un delito de oportunidad, no sólo porque sean mexicanos", dijo Debi Rose, representante en el consejo de la ciudad y estuvo en el grupo que el martes anunció un programa escolar de 300.000 dólares contra la discriminación y una colecta de fondos para comprar más cámaras de seguridad, entre otras medidas.
El mal estado de la economía afectó fuertemente a los grupos minoritarios, los empleos para adolescentes escasean y la ciudad quitó fondos de programas recreativos que los tendrían alejados de los problemas.
"Sólo espero que en algún momento estos jóvenes afro-estadounidenses noten que estamos en el mismo lado. Ambos somos minorías. Sufrimos la discriminación en varias partes del país", dijo Ruben Beltrán, cónsul mexicano.
(Reporte de Daniel Trotta; Editado en español por Patricia Avila)
jueves 5 de agosto de 2010 13:53 Por Daniel Trotta
NUEVA YORK ago 5 (Reuters) - Una ola de ataques de jóvenes negros contra inmigrantes mexicanos ha llevado a la policía a realizar una muestra de fuerza y a los políticos a tomar acciones rápidas, preocupados por el conflicto étnico en el suburbio neoyorquino de Staten Island, en Estados Unidos.
Profundamente preocupados por el conflicto étnico, autoridades de la ciudad, defensores de los inmigrantes y el consulado mexicano anunciaron una serie de medidas para reducir la violencia, pese a no estar de acuerdo sobre la causa de los ataques y la forma de detenerlos.
La situación combina dos de los problemas sociales estadounidenses más complicados: la difícil situación de los jóvenes negros que carecen de empleo y oportunidades, y los trabajadores inmigrantes que huyen de la pobreza y la violencia en sus hogares buscando empleos de bajo salario que los locales suelen negarse a tomar.
La policía investiga al menos 10 incidentes de golpizas o robos y delitos cometidos por prejuicio desde abril y ha inundado el vecindario de Port Richmond con patrullas, oficiales en las calles y torres de vigilancia móviles.
Expertos dicen que los incidentes podrían ser mucho más que los reportados, ya que los inmigrantes ilegales con frecuencia no denuncian delitos ante la policía por temor a ser deportados.
En las calles, los inmigrantes mexicanos hablan de cómo ellos o sus compatriotas han sido atacados, lo que sugiere que sucedieron más de 10 casos.
El aumento policial comenzó la semana pasada, luego de que el 23 de julio varios jóvenes gritando consignas anti-mexicanas atacaran a un mexicano de 31 años, rompiéndole la mandíbula y cortándole la cabellera mientras le robaban su mochila.
BLANCOS FACILES
Las golpizas suelen ir acompañadas de epítetos anti-hispanos, en algunos casos sin necesidad de que exista un robo de por medio.
"No es nada más que odio étnico", dijo Gerardo Garcia, un inmigrante jornalero de 29 años originario de Acapulco.
"Intentamos hacer las cosas bien. Trabajamos. Vamos a casa. No buscamos peleas. Pero siempre somos enfrentados por grupos de cuatro o cinco chicos negros que siempre quieren pelear. No buscan dinero, sólo quieren pelear", indicó.
Los jóvenes podrían estar buscando blancos fáciles para robar a hombres que portan grandes cantidades de efectivo en sus días de pago.
"Es un delito de oportunidad, no sólo porque sean mexicanos", dijo Debi Rose, representante en el consejo de la ciudad y estuvo en el grupo que el martes anunció un programa escolar de 300.000 dólares contra la discriminación y una colecta de fondos para comprar más cámaras de seguridad, entre otras medidas.
El mal estado de la economía afectó fuertemente a los grupos minoritarios, los empleos para adolescentes escasean y la ciudad quitó fondos de programas recreativos que los tendrían alejados de los problemas.
"Sólo espero que en algún momento estos jóvenes afro-estadounidenses noten que estamos en el mismo lado. Ambos somos minorías. Sufrimos la discriminación en varias partes del país", dijo Ruben Beltrán, cónsul mexicano.
(Reporte de Daniel Trotta; Editado en español por Patricia Avila)
No hay comentarios:
Publicar un comentario